Los perros son mejores y muy útiles para los humanos. Pueden ser grandes compañeros y muy buenos guardianes. Definitivamente son mejores mascotas que los gatos. A continuación se presentan muchas razones por las que los perros son mejores que los gatos como mascotas.
Para empezar, los perros están asociados con la seguridad. Esto se debe principalmente a que su oído y olfato son sensibles. Tener un perro como mascota es como tener un vigilante 24 horas en tu casa. Te protegen a ti y a tu casa incluso cuando estás dormido. Si sienten peligro, comienzan a ladrar para ponerte alerta. Cualquiera que tenga un perro de mascota en casa se siente más seguro. Este definitivamente no es el caso si tienes un gato como mascota.
Los perros son una mascota mucho más leal y cariñosa en comparación con los gatos. Un perro te entiende a ti y a tus emociones muy bien. Si estás triste, puedes hablar con él sobre tus preocupaciones. Son maravillosos oyentes. Escucharán atentamente todas y cada una de las palabras. También intentará consolarte y cambiar tu estado de ánimo. Por otro lado, un gato ni te entiende ni le molesta cómo te sientes.
Los perros son animales muy cariñosos
Nunca guardan rencor. En el momento en que regreses del trabajo, tu perro estará feliz de verte. Él mostrará su felicidad saltando sobre ti y lamiendo tus piernas y cara. Un gato, por otro lado, es de naturaleza vengativa. Incluso pueden ignorarte durante semanas.
Siempre que te apetezca, puedes llevar a tu perro a dar un agradable paseo refrescante. A los perros les gusta salir a caminar, mientras que a los gatos les gusta estar en el interior. Los perros también son muy juguetones por naturaleza. Puedes jugar con ellos todo el día. No podrías hacer lo mismo si tuvieras un gato como mascota, ya que son relajados y prefieren holgazanear. Además, los gatos son quisquillosos con la comida, mientras que un perro comería cualquier cosa.
Otra razón por la que los perros son mejores que los gatos como mascotas es porque los perros son más inteligentes. Se pueden entrenar más fácilmente que un gato. Tienen la capacidad de aprender trucos y comandos muy rápido. Una vez entrenado, un perro sería lo suficientemente útil como para incluso traer tus pantuflas o buscar tus papeles si se lo pides. Un gato, por otro lado, te ignorará por completo, ya que es de naturaleza arrogante.
Los perros aman a sus dueños de todo corazón. No pueden ver a nadie haciéndoles daño. Comenzarán a mover la cola incluso si alguien mira a sus dueños. Al ser animales tan leales, harían todo lo posible para defender a sus dueños. Sin embargo, si tienes un gato como mascota no puedes esperar lo mismo. Los gatos generalmente intentarían escabullirse. Todo esto definitivamente demuestra que, como mascotas, los perros son mucho más superiores que los gatos. Después de todo, no se dice simplemente que «el perro es el mejor amigo del hombre». Los perros te darán amor incondicional hasta el día de su muerte.